…y encima llámame tonto.

La semana pasada salió a la luz el famoso informe Pisa elaborado por la OCDE. Este informe sirve para establecer un ranking educativo entre los países del mundo y así dar a conocer su posición con respecto a otros. Como en el pasado informe del año 2009, España sigue por debajo de la media de la OCDE, llevándose la gloria China, Singapur, Hong Kong y Taiwán.

Si miramos la lista veremos que por debajo de esta media no estamos solos y nos encontramos cerca del Reino Unido y Estados Unidos, a este último incluso le superamos en dos puestos. Pero vamos a mirar otro informe, el ranking de universidades.

Según el Times Higher Education World University Rankings 2012-2013 vemos que las 10 primeras son inglesas y estadounidenses y la primera universidad china se sitúa en el puesto 35. Los españoles empezamos a salir en ese ranking a partir del puesto 201.

Con todos mis respetos por la OCDE pero el informe Pisa me la suda mucho. Es más, creo que España ha hecho trampas al igual que China en este informe y se ha elevado puestos, porque no cuadra nuestro nivel de educación con nuestro nivel de mano de obra barata y encarecimiento laboral ya que somos el duodécimo país con la mano de obra más barata del mundo.

Muchos son los políticos y periodistas que han criticado la posición del gobierno argumentando que hay una clara distinción entre los estudiantes con recursos y los que no, y entre el lado norte y sur del paralelo 40. Hoy me he preguntado si será cierto que en otros países la cultura escrita está más al alcance en otros países que en España.

Me ha costado encontrar en estas fechas el precio de los libros de textos, sin embargo, podemos hacer alguna comparación. Por ejemplo, en los libros de idiomas tenemos que Amazon USA un libro de español (Spanish Now!) a $20,34, en Inglaterra a 24,99 libras y un libro de inglés aquí 22,71 euros. No parece que haya gran diferencia, pero mucho ojo a los demás libros como Lengua y Literatura para 1º ESO que va en torno a los 30,83 o el desfasado Ética y Ciudadanía 4º ESO que rebajado sale por 31,96 euros.

Por otro lado tenemos la tendencia de llenar las aulas de ordenadores que endeudan más nuestra crisis. Richard Gerver asegura que es una tontería usar ordenadores en las aulas cuando los alumnos tienen mejor tecnología en sus hogares, sino que hay que implementar la educación con las nuevas tecnologías, como aulas virtuales o libros de textos digitales.

Eso está muy bien, pero díselo al Grupo Prisa propietario de la editorial Santillana. El mismo grupo que intentó despedir a casi 130 personas del periódico El País porque había una “crisis sin precedentes en el sector de medios impresos”. Ahora resulta que hacen falta. Vamos, no me jodas.

A todo esto salta la burra y oigo un comentario… así, por debajo del nivel medio auditivo que dice: “Cuatro de cada diez españoles no leen libros”. Pues vaya… y ¿Quién hace ese comentario? La Federación de Gremios de Editores de España. Uno de sus representantes por supuesto es Santillana, del grupo Prisa. También están nuestros amigos SM, que son los de los libros a más de 30 euros.

Siempre se ha comentado que en el mundo anglosajón se leen más libros, ¿Puede ser?

Ya lo creo, miremos los precios del bestseller Cincuenta sombras de Grey de E. L. James. En Estados Unidos lo tenemos a $9,57 (la versión digital a 8,15), en Inglaterra lo tenemos a 5,68 libras y en España lo podemos encontrar en las librerías a ¡¡17,90 euros!! Pim, pam, toma Lacasitos.

¡Eh!, pero cuidado. Que la culpa la tiene Apple. Ah, no. Calla. Espera. Eso era en Estados Unidos… Vaya, que cosas, y pensar que allí tienen Pearson, donde puedes conseguir libros de textos gratis online, que disgusto más grande me he llevado.

Menos mal que en este país se celebran congresos como el Congreso del Libro Electrónico de Barbastro que comentan cosas como que el libro digital no va a suplantar al libro impreso. Porque si uno lo piensa es una soberana estupidez. ¿Acaso se dejó de escribir a mano cuando salió la imprenta?

Los gobiernos y las editoriales elevan el precio y el acceso a la cultura… y encima te llaman tonto.